Los que arreglan coches, también conocidos como mecánicos automotrices, son los profesionales encargados de reparar y mantener los vehículos. Su labor consiste en diagnosticar los problemas mecánicos, eléctricos y electrónicos de los automóviles, y llevar a cabo las acciones necesarias para solucionarlos.

Estos expertos en automoción tienen amplios conocimientos en áreas como la mecánica, electricidad, electrónica y neumática, y están capacitados para trabajar en distintos tipos de coches, ya sean de gasolina, diésel o eléctricos.

Además de realizar las reparaciones correspondientes, los mecánicos también se encargan de realizar el mantenimiento preventivo de los vehículos, que incluye tareas como el cambio de aceite, revisión de frenos, neumáticos y sistemas de suspensión, entre otros.

En su día a día, los mecánicos automotrices utilizan herramientas y equipos especializados para llevar a cabo su trabajo, como gatos hidráulicos, llaves de torque, ordenadores de diagnóstico y osciloscopios. También están familiarizados con el uso de software de gestión de talleres, que les permite llevar un control de las reparaciones realizadas y facilitar el trato con los clientes.

Es importante destacar que los mecánicos deben estar al tanto de los avances tecnológicos en la industria automotriz, ya que los vehículos modernos cuentan con sistemas cada vez más complejos. Por esta razón, la formación continua es fundamental en su profesión.

En resumen, los que arreglan coches son los mecánicos automotrices, profesionales que se encargan de diagnosticar y reparar los problemas mecánicos de los automóviles, así como realizar su mantenimiento preventivo. Conocimientos técnicos, habilidad para utilizar herramientas especializadas y estar al tanto de las novedades de la industria automotriz son algunos de los requisitos de esta profesión.